27/2/10

Y es sábado...





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Porque a ella le gusta así.

La lluvia cae con mucha fuerza, rebota en el cristal de su balcón y vuelve a ella, la moja, la empapa, completamente. Cada gota, como cada lágrima, se posa en su rostro, sus brazos semidesnudos, sus rizos... toda. Mojada. Y la canción perfecta para no hacer nada. O para hacerlo todo. Esa es la cuestión.

Estudiar estudió. O no. Esa si que no debería de ser la cuestión. Estatuto de la Corte Internacional de Justicia. San Francisco. 26 de junio de 1945. Cartas. Convenios. Normativas. Reglamento. Leyes. Convenio de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar. Sí, Mar. Y se empapa de nuevo. Y se deja llevar... Mientras saborea el último bocado de bizcocho de cola-cao. Es lo que tiene no tener chocolate en casa y gozar de imaginación. O de google-recetas. ¿Qué importa?. El caso es que a ella le gusta así. Y está siendo un día bonico. Muy bonico.

Ahí fuera el aire sopla y resopla con fuerza. Y las gotas. Las gotas la mojan y el aire la(s) secan. Dejar secar las heridas al aire hasta que esté(n) completamente limpias. Las heridas y el aire. Desinfectadas y desinfectado. Y una vez ahí, volver a cortarse. Y sangrar. Sangrar mucho. Y volver a empezar.

--BCÁ--


4 comentarios:

ŁıĐįĄ ßãŌ dijo...

No sé si dejar palabras o gotas. Gotas de sangre. Secas. Y decir "yo también estoy mojada" sin que nadie se imagine pantalones. O faldas. Mientras la ciclogénesis bombardea la ciudad yo me bebo el último sorbo de cola-cao.
(Y qué bonita la canción. Qué bonita)

Andrés dijo...

oh, ludovico euinaudi, vaia descubrimento me acabas de facer raíña

Pepe Ventureira dijo...

Hola Bibiana...acercamiento íntimo al discurrir del día a día; palabras situadas en la frontera de un corazón abierto...la foto rellena esa sensación.

Un abrazo

FerDetective dijo...

Hermoso texto con una hermosa música. Gran descubrimiento tu blog...